El virus del Nilo Occidental.

¿Qué es el «virus del Nilo Occidental»? ¿Qué podemos hacer?

 

Escucha nuestro Podcast en «Días de Radio» (Candil Radio) – 03/09/2020:

 

 

Ante todo, lo que queremos dejar claro, es que no hay ningún motivo para el pánico. El virus del Nilo Occidental lleva entre nosotros muchísimos años. De hecho, los primeros casos detectados en Europa datan de finales de los años 50. En los 60, por ejemplo, se dieron varios brotes equinos en Francia. En España, ya sufrimos un brote, que afectó a dos personas en Cádiz, en 2010, y otro brote posterior, que afectó a decenas de caballos en 2013. En Coria del Rio, la misma zona en la que se ha detectado el último brote. En concreto en Coria, en la Puebla del Río, y en Los Palacios. Ya se sufrió un brote en 2016 que afectó también a los humanos

En EE.UU. también se ha sufrido varios brotes de este virus. Muy conocido es el brote de Nueva York en 1999, cuando caían los cuervos muertos. Porque, como si se tratara de una novela de Edgar Allan Poe, se sufrió una exagerada mortandad de aves en el zoológico del Bronx. Se contagiaron también numerosos cuervos, que caían muertos durante el vuelo, e incluso afectó también a muchos humanos. Sesenta y dos fueron hospitalizados y siete de ellos, desgraciadamente, fallecieron.

¿Cómo se trasmite el virus?

A través de los mosquitos, que principalmente afectan a los animales, en especial a los caballos, y las aves. Son varias las especies de mosquitos que pueden ser vector de esta enfermedad, prácticamente todos los de la familia del género culex. Son mosquitos muy pequeños, el mosquito adulto puede medir de 4-10 mm. Son hematófagos, es decir, se alimentan de sangre. Y alguno de los más conocidos son el famoso mosquito trompetero o mosquito común.

Hay que decir que el mosquito tigre, aunque puede ser también vector de este virus, así como transmisor de otras muchas enfermedades, como el dengue, la fiebre amarilla, o  artritis epidémica chikunguña o fiebre de chikunguña, son vectores con mucha menor frecuencia el culex pipiens o mosquito común.

En el norte de Grecia se detectó que los mosquitos tigres estaban infectados con el virus del Nilo Occidental, en 2010; y en 2014, en República Dominicana y Venezuela, se desató una epidemia por picadura de este mosquito en 2014, que dejó varias víctimas mortales.

Damos todos estos datos para ilustrar el alcance global de este tipo de enfermedades, que se encuentran en auge. Y aunque no hay que tener miedo, ni existen razones objetivas para ningún tipo de alarma sanitaria, debemos empezar a tomárnoslo en serio.

Desde finales del siglo XX y en especial en la última década, el número brotes de enfermedades transmitidas por insectos, y que eran desconocidas o prácticamente desconocidas en el hemisferio norte, están aumentando como consecuencia del calentamiento global.

¿Qué podemos hacer?

Lo primero, ignorar a todos los negacionistas del cambio climático. Es inútil discutir con los terraplanistas, los anti vacunas y los conspiranóicos que niegan el coronavirus, el cambio climático o le echan la culpa a Soros, a los judíos o a los masones. Esta es la primera regla. Ignorar y poner un cordón sanitario a quienes sufran algún tipo de paranoia conspiranoica o estén empeñados en sostener posiciones anticientíficas.

Ya lo avisábamos al final de la última temporada, cuando hablamos de la Liga Antimascarillas de San Francisco, durante la epidemia de 1918, y como hemos podido comprobar, la historia se repite en 2020.

Esto es muy importante: a los negacionistas y conspiranoicos, ignorarlos. Con educación, con respeto, pero pasar de largo. Vuestra salud, física y mental os lo agradecerán.

No merece la pena discutir con ellos. Lo mejor es ignorarlos.

Segundo: exigir a los gobiernos que tomen en serio el cambio climático. Si no queremos que dentro de unos años sea habitual sufrir brotes periódicos de Nilo occidental, dengue o fiebre amarilla, hay que combatir el cambio climático.

Exijan a las administraciones el control de las poblaciones de mosquitos. Desde el año 2003, el CSIC lleva alertando de la necesidad de controlar las poblaciones de mosquitos, actuando a tiempo para evitar la reproducción de estos insectos. Las administraciones. Todas. Han hecho oídos sordos.

Tercera recomendación: hacer nuestra parte, tomar parte activa en la transformación ecológica de nuestra sociedad. Reducir el consumo de plásticos, consumo consciente, reducir nuestra huella de carbono, etc. Ser ejemplo en vuestro entorno.

Cuarto: evitar zonas de reproducción de los insectos. Las larvas crecen en aguas estancadas, evitar tener aguas estancadas en casa. Por ejemplo, en los maceteros o cubos.

Quinto: Usar mangas largas y pantalón largo.

Sexto: Usar repelente de insectos. Echárselo tanto sobre la piel como en la ropa. Procurar que sean de buena calidad, es decir, con una buena concentración. Consultar al farmacéutico. Esto es muy importante, de hecho evitamos comentar compuestos que se pueden usar o fórmulas caseras para fabricarlos, porque la edad y los problemas dérmicos aconsejan o desaconsejan el uso de muchos de estos repelentes que se venden en el mercado. Además, las cremas solares o el maquillaje pueden interferir en la acción de los repelentes e incluso, en algunos casos, ser arriesgado usarlos juntos. Por eso hay que evitar comprar estos productos por internet o en supermercados e ir a la farmacia donde nos asesorarán del más adecuado para nosotros y nuestra familia, teniendo en cuenta, como hemos dicho, cuestiones como la edad, patología dérmicas y sobre todo la interacción con cremas hidratantes, cremas solares y maquillajes.

Además, los repelentes para la ropa, que muchos también pueden ser usados en mosquiteras, no son los mismos que se han de usar sobre la piel.

La mayoría, además, sólo es aconsejable su uso en exteriores. Cuando vamos a salir al campo o la playa, no para usarlos en casa o en la oficina.

Séptimo: Evitar salir al anochecer y al amanecer, en especial por zonas como parques o humedales, porque son las horas en las que los mosquitos están más activos. Los meses de agosto, septiembre y octubre son los peores.

Octavo: instalar en casa mosquiteras en todos las ventanas, teniendo cuidado en que la mosquitera que adquirimos tenga un gramaje de menos de 4mm. También es aconsejable usar mosquiteras en los cochecitos de bebe.

Noveno: buena higiene personal y evitar perfumes fuertes.

Décimo: apagar las luces siempre que sea posible.

Estas son nuestras recomendaciones. Como siempre aconsejamos, lo mejor en caso de cualquier duda es acudir a las fuentes oficiales y consultar con los profesionales de la sanidad.

 

Fuentes de las fotografías:

https://www.portalpolitico.tv/

https://www.elindependiente.com/vida-sana/2020/08/10/alerta-por-la-llegada-a-espana-de-un-nuevo-mosquito-transmisor-de-virus/

https://es.wikipedia.org/wiki/Fiebre_del_Nilo_Occidental

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