¿Dónde está Hoffa?

Escucha nuestro podcast en «Días de Radio» (Candil Radio) – 17/03/2022

Una de las figuras más llamativas de la Historia reciente de Norteamérica es Jimmy Hoffa. No solo es conocido por la película de Scorsese, sino por haber estado relacionado con la mafia y por ser protagonista de una de las desapariciones más impresionantes acontecidas hasta hoy.

 

¿Quién fue Jimmy Hoffa?

James Riddle Hoffa, nacido el 14 de febrero de 1913 en Brazil (Condado de Clay), desaparecido el 30 de julio de 1975 y asesinado el 30 de julio de 1982, fue un escritor, un sindicalista y activista, miembro de la Hermandad Internacional de Camioneros, una de las estructuras sindicales más importantes de los EEUU.

Desde los 25 años destacó por su implicación en el mundo sindical, llegando a vicepresidente nacional de IBT en 1952 y presidente general entre 1957 y 1971. Con su carisma y empeño consiguió convertir a su sindicato en uno de los más importantes de los EEUU, llegando a superar los dos millones de miembros.

Hoffa se implicó con la mafia desde los primeros tiempos, durando dicha conexión hasta su desaparición, y fue condenado por muchos motivos: manipulación judicial, fraude, soborno, etc. Condenado a trece años de cárcel. Tras haber llegado a un acuerdo con Nixon que implicaba su inhabilitación, intentó volver a presidir la IBT, pero acabó desapareciendo.

¿Cuáles son los elementos más curiosos de la vida de uno de los personajes más misteriosos de los EEUU?

 

La IBT.

Hoffa, como hemos comentado anteriormente, comenzó su actividad siendo muy joven en un sindicato: el internacional de camioneros. Allá por el año 1957, la IBT contaba con (afiliado arriba, afiliado abajo) un millón de miembros, lo cual ya, en los EEUU, les convertía no sólo en un sindicato, sino en un verdadero lobby de presión que hacía que la mafia posase sus ojos en ellos.

Ese año es que, tras ciertas maniobras políticas, Hoffa acaba presidiéndolo, sin (atención a esto) haber trabajo nunca jamás en su vida como camionero. Como hemos podido comprobar en diversas fuentes, el abogado William E. Bufalino le describía dentro de los siguientes términos:

“Nunca habrá otro así en los Teamsters [forma de denominar a los miembros de IBT]. Si fuera mujer, estará embarazada cada nueve meses. No sabía cómo decir que no. Hizo tantos favores para tanta gente […]”[1]. Tras haberse comprobado las relaciones de Hoffa con la mafia y las posibles acciones destinadas a lavar dinero a través de las presiones ejercidas contra empresarios, quien fuese Fiscal General, Robert Kennedy, comenzó a buscar atisbos delictivos en su comportamiento.

 

La desaparición de Jimmy Hoffa.

Podemos imaginar ya a estas alturas de nuestro encuentro que Hoffa era querido y odiado a partes iguales. Habría tanta gente que quería su regreso a la IBT como personas detrás de lograr su absoluta irrelevancia… o incluso, su desaparición.

Fue así que, tras haber sido convocado al restaurante de Detroit conocido como “Machus Red Fox”, nunca se volvió a saber de él. Y ahora, con razón, nos preguntaremos, “¿quién le convocó? Pues, por un lado, alguien conocido como Anthony Provenzano, uno de los líderes de los Teamsters contrarios al regreso de Hoffa como líder sindical; y por otro lado, Anthony Giacalon, un mafioso con intereses en todo el proceso.

Imaginemos por un momento el rol tan increíblemente difícil de las autoridades durante el intento de esclarecimiento de los hechos: el FBI, años atrás, les había estado investigando, así que el entorno más cercano a Jimmy Hoffa vería todos estos movimientos de investigación un serio riesgo de perder la libertad.

¿Cuál fue la realidad de los hechos? Que Hoffa llamó al mediodía a su esposa para decirle que nadie se presentó al encuentro. Poco después, lo único que se halló fue el vehículo de Jimmy correctamente cerrado. Tras haber consultado a quienes habían, supuestamente, convocando la reunión, demostraron no saber nada del tema.

Amigos y amigas… sólo quedaban teorías.

 

Las teorías sobre la desaparición de Jimmy Hoffa.

Un agente llegó a decir “creo que también hubo participación de la mafia. Creo que hicieron desaparecer el cuerpo de Hoffa ese mismo día y nunca más va a aparecer”. Por el motivo que fuese, una persona que había estado tan bien relacionada y que parecía responder a sus únicos intereses dejó de ser interesante para todo el mundo…

¿La realidad? Que en Michigan se le declaró muerto en 1982, sin haber recuperado nunca su cadáver y sin tener ni la más mínima pista de dónde se podría encontrar él (o sus restos mortales). Y claro: ante una cosa así, ¿qué nos encontramos? Evidente: teorías de la conspiración.

Una de las teorías[2] apunta a que podría haber sido asesinado por un señor llamado Frank Sheeran, que había trabajado como parte de su seguridad personal. Aunque parecía no tener sentido, si es cierto que Scorsese basó su película en ello. En 2012 alguien encontró cierta anomalía en el parque de una casa de Detroit, pero no… tampoco eran los restos de Hoffa.

Otra de las teorías es que el cadáver de Hoffa pudiese encontrarse bajo muchísima cantidad de cemento en el estadio de los Gigantes, en New Jersey, todo un símbolo dentro del deporte norteamericano. Tampoco el FBI encontró ningún indicio de esta teoría, muy apoyada a su vez por Tony “el Griego”, un sicario mafioso, en el año 1989.

Una teoría aparte, y muy interesante, fue la defendida por Joseph Franco, hombre fuerte de Hoffa: podría ser posible que Jimmy hubiese sido recogido por agentes del FBI, subido a un avión y enviado a algún lago de Michigan. Podría ser verdad… o no.

Podría ser también plausible que el conocido como “The Iceman”[3] lo asesinase, llevando sus restos a un depósito de chatarra, guardándolo en un bidón y prendiéndole fuego, desenterrándolo posteriormente y vendiéndolo como chatarra en el maletero de su propio coche. Se dice que podría haber recibido más de 40000 dólares por ello. Todo el mundo pareció dudar de ello…

 

Conclusiones…

Sean o no ciertas algunas de las teorías sobre la desaparición de Jimmy Hoffa, con el paso de las décadas se ha ido convirtiendo en una de las figuras más llamativas de la historia reciente de los EEUU. Líder carismático, sindicalista, con relaciones con la mafia, en un momento dado (y eso está más que claro en el conjunto de los sucesos) dejó de ser útil su existencia.

Pero, realmente, ¿para quién? Quizá algún día sepamos qué fue lo que ocurrió realmente.

 

Notas al pie:

[1] Declaraciones al Washington Post en el año 1982.

[2] Recogida en un libro de Charles Brandt titulado “Escuché que usted pinta casas: la historia de Frank Sheeran y el caso final sobre Jimmy Hoffa.”

[3] Kuklinski, sicario de New Jersey.

Para saber más:

1.- www.bbc.com

2.- www.wausaupilotandreview.com   

 

Fuentes de las fotografías:

1.- www.elcomercio.pe   

2.- www.zendalibros.com

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.